El último día de la inquisición en Cadiz
El último día de la inquisición en Cadiz El único grito que se oyó desde la pira y a través del ruido del fuego, fue un "¡nos volveremos a ver!"; el resto del bullicio, emanaba de los curiosos y de los inquisidores, quienes veían arder en estoico silencio a doña Lucía de Nidos, esposa del sabio don Tomás Quiroga de la Huerta. Él, observaba el fuego con las manos apretadas de rabia y los ojos encendidos en cólera, con las barbas empapadas en amargo llanto, y con palabras de venganza en los labios, que era mejor, aún no pronunciar. Quedose en la ejecución hasta el final. Poco antes de despuntar el alba y posterior al momento en que se fue el último curioso; cuando las brazas y ascuas se habían apagado y los inquisidores retirado, en la más absoluta soledad y con el corazón partido en dos; de entre los carbones y cenizas, retiró los huesos ennegrecidos de la que se proclamó su mujer, por casi venticinco años. Cargó el cajón en el carretón, y a...